SOSPECHA. Un artículo de Frank G. Rubio
SOSPECHA. Por Frank G. Rubio
Ya sólo un dios puede salvarnos…Heidegger.
“Me he estado preguntando si no hay una explicación muy sencilla a toda la locura que estamos presenciando en el mundo. ¿Y si nuestros supuestos "expertos" estuvieran simplemente haciendo lo que los programas informáticos -¿la IA? - les dicen que hagan? ¿Y si prácticamente todas las políticas y/o decisiones se estuvieran elaborando en superordenadores y los tecnócratas fueran simplemente los agentes humanos que ejecutan esas "decisiones"?
Al principio de la “plandemia”, por ejemplo, se nos dijo que iban a ocurrir todo tipo de cosas terribles... como resultado de los "modelos informáticos". Constantemente se nos sermonea sobre el "cambio climático", que es un concepto que proviene principalmente de los modelos informáticos. Entonces, ¿qué ocurre cuando esos modelos son defectuosos y, además, están conectados a una inteligencia artificial que es capaz de modificar su propio programa según las circunstancias? Sospecho que si el propio programa original es producto de seres humanos intrínsecamente defectuosos, el "núcleo" defectuoso seguirá siendo defectuoso y, a medida que aumenten las modificaciones de su propia programación, los efectos del defecto del núcleo no harán más que crecer, quizá de forma exponencial.
Y ya que estamos, añadamos la advertencia de Elon Musk de hace unos años: ¿y si, al inventar la inteligencia artificial, abrimos la puerta para que algún tipo de "entidad hiperdimensional" se apodere de ese sistema, sin que lo sepan sus inventores humanos?”
Este texto es la traducción de un fragmento de un artículo de Joseph Farrell, un escritor norteamericano especializado en temas esotéricos y paranormales, bastante interesante en general. Pero vayamos un poco más allá…
¿Y si las IA están siendo utilizadas para ensamblar un Egrégor del que formaría parte toda la población mundial? La finalidad sería hacer emerger una conciencia colectiva modulada y dirigida que pudiera “contactar”, o ser receptora, de una Inteligencia Extraterrena. WE…NOSOTROS…MY…
Hacia el país del Ángel Eléctrico…
De ahí la impaciencia y los métodos draconianos de nuestras élites globalistas que pretenden salvar sus trastos, algunos no los llamarán impropiamente “privilegios”, con esta arriesgada y escatológica operación.
¿Inmanencia del Eschaton?
Tras toda esta concentración insana de poder en ciernes hay un fuerte hedor ocultista; interesante que las máximas autoridades religiosas lo asuman con naturalidad. Incluso perennialistas como Carlos de Inglaterra se apuntan gozosamente al proyecto. Hoy todas las clases dirigentes van, literalmente, en el “mismo barco”:
Esa “nave Tierra” que es interpretada de manera completamente artificial a través del mecanicismo ecológico y sus engranajes, cognoscibles sólo mediante complejas simulaciones informáticas.
Pero ¿y si no estamos sólos? ¿Y si existen realmente los dioses o Dios y duermen o nos contemplan en silencio? ¿Acaso todo esto no es reflejo de la metáfora de los Titanes vencidos por los Olímpicos que buscan retornar?
La Inmanencia en la que se despliega todo este escenario no admite otra interpretación espiritual y metafórica, basta ver la calidad humana de los actores que la despliegan, que la verosímil plasmación de una tiranía planetaria elaborada por conjurados e impostores. La revolución telúrica, enmascarada en el pasado tras la “revolución mundial”, emerge ya de las profundidades…
Recordad que detrás del Turco, el presunto jugador de ajedrez automático decimonónico, lo que había era un enano. Quizá detrás de la IA a cargo de todo Esto se encuentre ese tuerto entrañable llamado El Dajjal.
Que ustedes lo disfruten mal.
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